Escrito por Alejandro Buenrostro
24 de junio, 2025. León, Guanajuato.
- Introducción
En el presente texto “La desaparición de personas en México. Reivindicación de la memoria desde el pasado” se presentará una discusión teórica sobre la categoría originaria de la desaparición forzada y su incompatibilidad con el caso mexicano. Posteriormente se realizará un breve recorrido histórico no lineal en razón a la problemática. En ese sentido, se tendrán los elementos conceptuales con mayor relevancia para derivar en un análisis de la dimensión política de la memoria y su contraparte social que han utilizado ciertos proyectos por parte de la sociedad civil como resistencia ante los “cierres” que el Estado a impuesto a desapariciones del pasado. Finalmente, se expone el concepto de “presente presente” como una práctica que recupera la colaboración y el sentido de la memoria en un posible proceso de justicia transicional en el país.
- La ambigüedad en la desaparición de personas en México
La desaparición de personas es un fenómeno complejo y extenso. Buscar o establecer una aproximación teórica desde la academia, representa en sí mismo un objeto de controversia. En razón a ello, existen ciertos elementos contextuales que son inherentes a las categorías y por ende, son operacionales en ensayos o proyectos de investigación. Cuando dichas caracterizaciones han intentado incidir en otros espacios (con una realidad distante), su contenido carece de objetividad y podría perder su propósito inicial. Por tal motivo, la “concepción originaria o argentina” de la desaparición forzada que propuso en su momento el sociólogo Gabriel Gatti (2008), ha sido fundamental para visibilizar lo ocurrido en las dictaduras del Cono Sur, entre ellas: Argentina, Chile, Brasil y Uruguay. Sin embargo, el éxito de la figura del “detenido-desaparecido” resulta insuficiente para describir otros escenarios, como el caso mexicano. El propio Gatti (2022), en su obra “Desaparecidos: Cartografías del abandono” desarrolló la complejidad que representa la desaparición de personas en la sociedad mexicana, por el sobrecogimiento de la categoría.
Si bien, existen algunos elementos que pueden significar cierto grado de similitud, cada país y región cuenta con su propia historia de la problemática. México no es un caso aislado, diversos autores como Camilo Ovalle (2019); Rodolfo Gamiño (2022); Marcela Turati (2023); Pilar Calveiro (2021); Fabrizio Lorusso (2020) han enfatizado en múltiples especificidades del contexto mexicano sobre la desaparición de personas. A continuación en la figura 1, se presenta una línea del tiempo al respecto que, evoca la conexión intrínseca con las desapariciones del pasado con las del presente. Su contenido expresa periodos amplios y eventos precisos que comparten un elemento en común: un proceso de reivindicación de la memoria pendiente.
Figura 1. Historia no lineal de la desaparición en México

El propósito de exhibir la relación entre diferentes eventualidades o periodos en razón a la desaparición de personas en México, radica en exhibir otras ramificaciones de la memoria como una práctica utilizada por las comunidades para dignificar a las víctimas y no por el Estado. Por ello, en el siguiente apartado, se interpelan dos cuestionamientos principales: ¿Cuál es la dimensión política de la memoria y cuál es su propósito? y ¿cómo se podría articular la memoria por parte de la sociedad civil en el presente? De esta forma, se podrá inferir cómo tratar las desapariciones como una crisis humanitaria latente, pero con una herencia histórica imborrable; una problemática pública que continúa atentando en el territorio nacional a sujetos desechables (Ansolabehere, 2024), pero con carpetas de investigación activas en casos que permanecen en la impunidad (Chávez y Guevara, 2018).
- La memoria
La memoria tiene diversas connotaciones y dimensiones que podrían incidir o afectar en el fenómeno de la desaparición de personas. Por consiguiente, se describen dos lineamientos centrales: su aspecto político que, ha opacado crímenes del pasado, y su aspecto social, que en ciertos proyectos como “Huellas de la memoria” ha gestado una forma de resistir ante dicha imposición. Estas caracterizaciones harán proclive un análisis no lineal al respecto.
Se entiende como dimensión política de la memoria:
Cómo recordamos el pasado a nivel social, cultural, material y emocional, individual y colectivamente […]. Esta capacidad de empujar los acontecimientos al “pasado” ha llevado a los Estados, y a otros actores, a intentar utilizar técnicas de memorialización (las maneras en que practicamos la memoria) para suavizar la ambigüedad de la desaparición, con el fin de colocarla en el pasado y clausurar el espacio político. (House, 2023, p. 108)
Bajo estos parámetros, el Estado daría un pseudofinal a crímenes donde las fuerzas armadas, como una ramificación del mismo, estaban directamente involucradas. Por lo cual, se puede inferir que, la desaparición forzada como una práctica sistemática (Naciones Unidas, 2024) ha sido “olvidada” como un hecho del pasado y no contiene un vínculo con las cometidas en el presente. Dichos argumentos se construyen y solidifican a través del control de las narrativas (Robledo, 2016) y de la memoria. Este último elemento, se ha utilizado “para colocar eventos y personas en disputa en este pasado distante y así intentar solucionarlos, disminuir su capacidad política y alejarlos” (House, 2023, p. 112). Los monumentos o memoriales como, el “Memorial a las víctimas de la guerra sucia” han impuesto un cierre a un periodo que no ha sido resuelto por las autoridades, exhibiendo un ámbito de impunidad y de violencia gubernamental (Allier e Imai, 2023).
Interpelar a la dimensión política de la memoria desde sitios provocados por la sociedad civil y/o colectivos de búsqueda, es un proceso arduo y continuo. Por tal motivo, House (2024), propone el concepto de “presente presente” que evade la verticalidad y el estudio lineal de las ausencias. ¿Por qué se utiliza dicho marco teórico?
Puede acomodar la complejidad de la desaparición, invitándonos a explorar los aspectos espaciales y temporales de la memoria de una manera no lineal. […] el presente presente no es sólo un sinónimo de vida, sino que, al forzar un enfoque distinto sobre la temporalidad y la espacialidad, posibilita una memoria que se difunde y que se practica. (House, 2023, p. 113)
La memoria como elemento que conecta sensibilidades y hace visible lo suscitado en otros espacios, fomenta la lucha incesante por los actos de injusticia que han protagonizado instituciones y actores estatales. La profundidad y los posibles alcances por replicar proyectos que contengan un impacto social sobre la problemática, podría provocar en la población empatía y un sentido de reflexión crítica.

La posibilidad de una transformación sociopolítica a través de la memoria, es parte de los objetivos o componentes esenciales de los colectivos de búsqueda, entendidos como: un conjunto de acciones o episodios que están ligados por un fin último y que recurren a diversos repertorios (Tarrow y Tilly, 2007) para su visibilidad en el espacio público. El sentido de pertenencia, identidad y compromiso, no representan un conflicto en el esparcimiento de la memoria en las comunidades por su principal propósito: encontrar lo que el Estado intentó sepultar. Aunado a ello, el proyecto de Huellas de la memoria, ha proporcionado “una memoria que es colaborativa, receptiva y reflexiva, y que deja espacio a la ambigüedad de la desaparición mientras realiza una clara intervención política” (House, 2023, p. 121). El derecho a incidir en las decisiones arbitrarias y políticas verticales, es parte de la misma República que ha consumado múltiples esfuerzos por callar, reprimir y desaparecer a individuos que, son construidos socialmente como no merecedores de ser llorados (Butler, 2020). El proceso de reivindicación de la memoria, desde las voces que han sufrido las afectaciones del fenómeno, podría ser el eje articulador de una justicia transicional eficiente y proactiva en México. Mientras no exista dicho cambio en el territorio nacional, difícilmente se podrá garantizar la reducción de las desapariciones, la no repetición, el acceso a la verdad y a la justicia.
- Conclusión
En el presente ensayo se trató la memoria como un elemento intrínseco de las ausencias en México. Se interpeló la dimensión política de la misma, describiendo el concepto de presente presente en las desapariciones, como un análisis histórico no lineal que es utilizado por colectivos de búsqueda en la elaboración de sitios de la memoria, además de otros proyectos. El propósito de criticar públicamente los memoriales impuestos por el Estado, en sí mismo, es una práctica que reivindica y dignifica las víctimas de la mencionada catástrofe (Gatti, 2008). En razón a ello, surgen nuevos cuestionamientos que deben resolverse prioritariamente por la crisis humanitaria y las múltiples violaciones a derechos humanos que implica la desaparición de personas en México. ¿Cómo podrían los actores estatales visibilizar los sitios de la memoria?, ¿deberían de clausurar los memoriales impuestos por el Estado?, ¿cómo podría configurarse una justicia transicional en México desde el presente presente?
“Porque vivos se los llevaron (en el pasado) y vivos los queremos (en el presente)”
- Referencias
Allier, E. y Imai, T. (2023). En el cruce de la violencia de Estado y la delictiva: lugares de memoria en México. En A. Délano, B. Nienass, A. de los Ríos y M. De Vecchi (Eds.), Las luchas por la memoria contra las violencias en México. (Primera ed., pp. 287-316). El Colegio de México.
Ansolabehere, K. (2024). Caminos del reconocimiento público. Un marco para pensar las respuestas a las desapariciones. En K. Ansolabehere, S. Serrano y A. Martos (Coords.), Desapariciones y regímenes de violencia. Lecciones desde México. (Primera ed., pp. 1-28). Universidad Nacional Autónoma de México, Instituto de Investigaciones Jurídicas.
Butler, J. (2020). Sin miedo. Formas de resistencia a la violencia de hoy. Taurus.
Calveiro, P. (2021). Desaparición y gubernamentalidad en México. Historia y grafía, (56), 17-52. https://doi.org/10.48102/hyg.vi56.355.
Chávez, L. y Guevara, J. (2018). La impunidad en el contexto de la desaparición forzada en México. Eunomía. Revista en Cultura de la Legalidad, (14), 162-174. https://doi.org/10.20318/eunomia.2018.4161.
Gatti, G. (2008). El detenido-desaparecido. Narrativas posibles para una catástrofe de la identidad. Ediciones Trilce.
Gatti, G. (2022). Desparecidos: Cartografías del abandono. Turner Noema.
House, D. (2023). Situar la memoria en el presente presente: las personas desaparecidas de México. En A. Délano, B. Nienass, A. de los Ríos y M. De Vecchi (Eds.), Las luchas por la memoria contra las violencias en México. (Primera ed., pp. 107-128). El Colegio de México.
Lorusso, F. (2020). Una discusión sobre el concepto de fosa clandestina y el contexto mexicano. El caso de Guanajuato. Historia y grafía, (56), 129-170. https://doi.org/10.48102/hyg.vi56.354
Ovalle, C. (2019). Tiempo suspendido. Una historia de la desaparición forzada en México, 1940-1980. Bonilla Artigas Editores.
Robledo, C. (2016). Genealogía e historia no resuelta de la desaparición forzada en México. Íconos – Revista De Ciencias Sociales, (55), 93–114. https://doi.org/10.17141/iconos.55.2016.1854.
Tarrow, S., & Tilly, C. (2007). Contentious politics and social movements. En C. Boix & S. C. Stokes (Eds.), The Oxford handbook of comparative politics (pp. 435–460). Oxford University Press.
Turati, M. (2023). San Fernando: última parada. Viaje al crimen autorizado en Tamaulipas. Aguilar.








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