Dos de octubre, 2025
Lo ocurrido hace 57 años es de suma importancia no olvidar. La represión estudiantil ocurrida en la plaza de las tres culturas, Tlatelolco, es un claro ejemplo de la violación a los derechos humanos ejercida por el Estado. La masacre de la sociedad civil y de los estudiantes es un delito que no debemos permitir que ocurra nuevamente en la historia de la humanidad.
El 2 de octubre de 1968 es un suceso que marcó la vida política y social de nuestro país, el cual debemos conservar en la memoria colectiva e histórica como un recordatorio de la importancia de la lucha por los derechos humanos, la democracia, así como por la justicia. Por eso hoy y cada día por venir, debemos exigir esclarecer lo sucedido, hacer pagar a los culpables, así como abrir mesas de diálogo entre el gobierno y la población, pidiendo con firmeza que el gobierno escuche, resuelva y no utilice su fuerza armada para disolver manifestaciones pacíficas. Animarse a apoyar en las movilizaciones, sensibilizarnos y ser solidarios con las causas justas que nos conciernen a todas y todos, es de las mejores maneras de contribuir como individuos que forman parte de una sociedad que ha sido violentada.
Hay que mantenernos informados e informar a conocidos y familiares, de que la masacre perpetrada por el gobierno no se vuelva repetir ni en México ni en ninguna otra parte del planeta.
No a la represión
No a la desaparición forzada
Y exigimos justicia en este caso, así como por los compañeros de Ayotzinapa porque vivos se los llevaron y vivos los queremos.
Karen Reynoso es Licenciada en Relaciones Internacionales por la Universidad Nacional Rosario Castellanos. Maneja líneas de investigación en globalización multipolar, geopolítica, migración internacional







Deja un comentario